Producción Personal.

Marcos Aguinis vive solitario en un pueblo en las sierras de Córdoba, rodeado de bellos paisajes. Su pequeña cabaña está situada a orillas de un manso y cristalino río, lo que lo incentiva a escribir sus historias, algunas reales y otras, fruto de su imaginación.

Todos sus renglones los escribe a la luz de una pequeña lámpara, lo que poco ayuda a que su vista cada vez vaya disminuyendo. Sus escritos los realiza en papeles que encuentre sin uso cuando va a la ciudad a comprar la poca mercadería a la que puede acceder con sus escasos recursos económicos, que se los envía su hermana mensualmente, lo que le ayuda para su subsistencia.

Poco a poco su espalda le va doliendo más día a día, muchas veces quiere dejar su labor ya que se siente cansado y muy adolorido, pero cada vez que tiene este pensamiento, una voz interior le da fuerza para seguir escribiendo sus grandes obras, ya que a través de ellas gran parte de la humanidad conoce la realidad de los hechos históricos que han ido ocurriendo a lo largo de los años.

Su incentivo es que la gente conozca parte de la realidad de nuestro país y de otros también, hechos que marcaron la realidad actual.

Todo ésto, le da fuerza para seguir adelante, a pesar de las necesidades económicas y grandes dolores y falencias físicas.